España instala un sistema de semáforos para ayudar al raro lince ibérico a cruzar la calle

(Foto: Getty)

Se utilizará un sistema de alta tecnología en España para evitar que el lince ibérico, en peligro de extinción, sufra una de sus mayores amenazas: ser atropellado por automóviles.

Unos sensores infrarrojos y una cámara térmica registran la presencia de uno de los felinos más amenazados del mundo a medida que se acercan a las carreteras y envían un aviso a una unidad de control.

Esta unidad activa una señal de alerta para los conductores y les advierte a través de señales que reduzcan la velocidad hasta el límite de velocidad.

El sensor de radar mide si el automóvil realmente ha disminuido la velocidad. Si lo hace, el sistema deja de actuar.

El programa también incluye letreros que piden a los automovilistas que reduzcan la velocidad en áreas donde se sabe que vive el lince.

Los veterinarios, que han estado detrás de un programa de 20 años llamado Life LynxConnect para salvar al felino de la extinción, saben dónde vive el lince ya que son rastreados por collares GPS después de ser liberados en la naturaleza del cautiverio.

Las muertes en carretera y la caza furtiva por parte del hombre son dos de las mayores amenazas para un animal catalogado como “en peligro” por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.

Hace veinte años, el lince fue catalogado como “en peligro crítico” tras décadas de ser cazado por el hombre, la dramática pérdida de su propio hábitat y una sucesión de enfermedades que diezmaron la población de su alimento básico: el conejo.

Los investigadores estimaron que solo había 94 linces vivos en 2002.

Ahora hay un estimado de 1.100 de estos felinos en España y Portugal, según un censo de 2020.

“Hoy en día las mayores amenazas para el lince son los atropellos y también la persecución de los cazadores. Claro que es difícil evitar que estos animales sean derribados”, dijo Guillermo López, un veterinario que trabaja en un esquema de preservación del lince.

“Este programa virtual se ha puesto en marcha para tratar de proporcionar cruces seguros para el lince que trata de advertir a los conductores si hay fauna cerca”.

El gobierno regional andaluz en el sur de España, donde se concentra la mayor población de linces del país, invertirá 370.000 euros (307.000 libras esterlinas) en el programa.

Life Safe Crossing, que también cuenta con el respaldo de la Unión Europea, también se ha empleado en Italia para evitar que el oso pardo y los lobos sean atropellados.

En Italia, el oso pardo de Marsican ha sufrido un período de largo declive con las últimas cifras estimadas en solo 50.

El programa también se ha utilizado en Rumania y Grecia para salvar sus poblaciones de osos pardos en declive.

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